Espacios Cerrados en la literatura (I): «Malpertuis», de Jean Ray
Hay aquí un confinamiento terrible del que es imposible escapar, lo familiar que deviene horrible, ominoso. ¿Quién duda ya de que esta antigua casa sea la puerta abierta a nuestro propio subconsciente? Aquí reposan los monstruos, soterrados en desvanes. En nuestra mente, reposan otros, toda vez que, en el fondo, Malpertuis sólo está construida en el foco mismo de cada uno.
La película que (al fin) cayó del cielo
Lo exterior, como siempre en Lovecraft –y en un continuador ejemplar como el antedicho Derleth- trae devastación y desesperación: no hay un enemigo físico real para la batalla, sino que, por el contrario, es su propia familia la que se convierte en algo monstruoso. No desechen la posibilidad de ver esta película si son amantes del universo Lovecraft.