Por los acantilados de Circe
Mientras tanto nosotros mismos sucumbimos a la lectura hipnótica de esta trama que se retuerce y multiplica y complica, no con inmadurez repito, sino con una suerte de desprejuiciada osadía literaria. Esta novela es de cuando la novelista irlandesa todavía intentaba lo imposible. Sabemos que su origen está en un viaje por los acantilados de Moher, en Irlanda. El imán del mar, como lo vetado, pudo acompañar a la autora durante ocho kilómetros, en algunos tramos desde más de doscientos metros de altura. Imaginemos que estamos cercados pero por lo infinito. El espacio que recrea Murdoch posee elementos que obedecen a los clásicos del género, por ejemplo la ciénaga misteriosa en la que uno espera oír el aullido de la fiera de Baskerville, o el dolmen que sirve de testigo de una antigüedad tan oscura como inabarcable. Y luego que no, que no es un mar para nadar. Porque en estas aguas de la página nos espera un mar para leer.
Como si no hubiera lenguaje
Porque todos somos, si se nos provoca, apasionados terroristas y antiterroristas. Sin Terror -en el sentido vago y mágico que esta palabra tiene en Francia-, ¿quién querría vivir y, sobre todo, escribir? El terror es lo que confiere el fuego y la llama, el horror y el disfrute, a nuestra vida de tinta. Los torturadores y las víctimas, las corridas de toros, las bayonetas, los alambres de púas, el abuso y el éxtasis nos dan un placer ficticio. Y por eso sería instructivo analizar el desgarro de nuestro pensamiento, de nuestras emociones, entre los dos cabos –apolíneo y dionisíaco- que pueden ser designados por los nombres de Paulhan y Bataille: escritores aterrorizantes, aterrorizados y sendos hombres de letras. El lingüista bloqueado y el vergonzoso archivero, editores de revistas y directores de conciencia, unidos por el erotismo.
Poder i Santedat
Una cruz gigante en la que un joven, Lucio, recibe los símbolos de la Pasión y es crucificado. Una crucifixión por haber infligido daño a la libertad religiosa, cuando en realidad lo que ha hecho ha sido defender su propia libertad a creer en un Dios que no es el del Vaticano. Llama la atención […]
El amor: una investigación
El pensamiento de Hannah Arendt es la huella que su pensamiento deja cuando le excluimos el concepto mejor. Se nos escapa si poseemos su más perfecta imagen, lo hace precisamente porque la tenemos. Así que es verdad que se separó, y mucho, de San Agustín, incluso de un modo llamativo para una simple tesis doctoral. Lo que Antonio Campillo va a demostrar de modo ejemplar es que ella se separaba así de sí misma, y lo hacía tanto como para no hallar jamás por completo el camino de vuelta. Porque la pasión es sin mundo, y los amantes no hablan de verdad sino que hacen verdad poéticamente.
Nouvelle Vague. La ola que no cesa de Fernando Usón Forniés
El próximo 5 de Octubre sale a la venta el libro Nouvelle Vague. La ola que no cesa (Desfiladero Ediciones), de Fernando Usón Forniés. Se trata de uno de los mayores estudios sobre esta corriente cinematográfica francesa, cuya huella en la Historia del Cine es apasionante. El ensayo recoge la etapa completa de este colectivo […]