No puedo respirar sin hacer trabajar mi ingenio. ¿Para qué otra cosa merece la pena vivir?
Arthur Conan Doyle
– Descubriendo el enigma de Sherlock: La novia abominable –
Después de 6 años en antena, he aquí 90 minutos que plantean dos cuestiones fundamentales: ¿quién es realmente Sherlock Holmes y qué le hace tan especial?
The Abominable Bride (La novia abominable) es la punta del iceberg; tras los estimulantes capítulos emitidos en BBC One desde 2010; un nuevo y sentido homenaje a uno de los más célebres escritores de todos los tiempos. Ansiado producto y motivo de alegría para su público, pues de principio a fin se desmenuza con elegancia el palacio mental que oculta la residencia del número 221B en Baker Street.
La importancia de este singular capítulo radica en su fondo y forma, diferente a lo visto con anterioridad. Gracias al poder de la lírica contemporánea e imaginativa, Sherlock logra viajar al siglo XIX; donde el personaje fue concebido; para deleitarnos con un nuevo misterio a resolver: averiguar, junto a Watson, si los fantasmas existen o son fruto de nuestra invención.
Para esto Mark Gatiss y Stephen Moffat hacen escala en medio de un vuelo, le colocan la chistera y el bigote al dúo detectivesco y dejan que prosiga la trama. Mas nada es sencillo en el lúgubre Londres de 1895, menos cuando se trata de comprender la psicología humana.
¿Qué obtiene el público a cambio? Un resultado didáctico, instructivo e inesperado; que hace hincapié en descubrir cómo se crea el método loci, o más conocido como técnicas para mejorar la memoria y su utilidad.
¡Sé a donde hay que ir!
Sherlock
En The Abominable Bride (La novia abominable) Sherlock decide no perder la cordura y desafiarse a sí mismo, analizar hábilmente la situación estableciendo paralelismos entre las visiones de la señora Ricoletti y Moriarty; para así dar con la clave del juego psicológico en el que se ve inmerso. Sencillamente nadie puede despertar de la morgue, y menos los fantasmas del pasado, sólo es una ilusión irracional de la que se ha de desprender confiando en la lógica y saltando hacia el abismo. Ahí es nada.
El estreno de este especial se produjo tanto en salas de cine como en televisión, otorgándole al evento una demostrable consideración única por parte de la BBC.
La mayor baza es su titánica calidad técnica; el malabarista Douglas Mackinnon es quien dota de estilo e identidad cinematográfica a este relato profeminista que implica indirectamente a las emociones del espectador.
Con todo, no hay que deslucir el hecho de poder contar con el grupo actoral al completo y en plena forma, facilitando aún más la credibilidad propuesta por Douglas. Es este sublime trío protagónico el que hace de Sherlock lo que es: Benedict Cumberbatch, Martin Freeman y el minusvalorado Rupert Graves.
Sin duda, BBC siempre ha entendido a la perfección la psique detectivesca (véase la aclamada Luther o la recién estrenada Happy Valley), dominando la de Sherlock Holmes en particular desde el éxito acontecido en aquel lejano 1964. Un personaje clásico e inmortal al que, pista tras pista, le queda un largo sendero por recorrer…¡Gracias Sir Conan Doyle!
– Epílogo –
*The Abominable Bride (La novia abominable) es un ejercicio para superar estereotipos, y es ahí donde puede sustraerse una dura reflexión. No hay que censarse por el delirio alucinógeno ni quedarse tejido en burlas. Aceptamos la realidad que nos presentan, los denostados convencionalismos, pero la vida es frágil y uno ha de ser capaz de gobernarse.