Demasiado largo para un corto, demasiado breve para un largo, el término medio en un relato es una virtud, y los 25 minutos de este corto son excesivos, 25 minutos corriendo en la nieve aportan lo mismo que 5, y de eso se resiente una historia necesaria pero excesiva. Al padrecito Stalin le molestaban muchas cosas y le sobraban muchas más, los derechos de los ciudadanos de la URSS eran molestos y por eso eran inexistentes, cualquier excusa era suficiente para iniciar una diáspora forzosa, los traslados forzosos de nacionalidades de un extremo a otro del país era una forma de castigar a aquellos que no le habían sido suficientemente fieles o que durante la guerra se habían mostrado demasiado complacientes con el ocupante alemán. En 1944 se produjo una gran deportación de chechenos sacándoles a la fuerza de su país, eso es lo que se retrata en esta película, de factura impecable en lo visual, ayudada por el paisaje de la región, tres bloques muy diferenciados y demasiado evidentes, la caza del lobo por parte de dos hermanos que mientras buscan a la fiera evitan la deportación de su pueblo por suerte, la búsqueda de la madre que junto con todo el pueblo ha sido deportada y el conflicto entre el hermano mayor y el pequeño ante la inevitabilidad de la situación. En la extensión pierde su fuerza la historia y el mensaje, y desde luego, hay muchas cosas que sobran, tiempo y esa tercera parte donde, queriendo culpar a la guerra de una muerte idiota, se transforman en innecesarios sus últimos siete minutos.
(Miguel Martín)
Amanece Metrópolis con sus reseñas de los cortometrajes de La Guarimba Film Festival aporta su granito de arena en la difusión de dicho festival. Gracias a todo el equipo de La Guarimba.
[…] Dollhouse (Chad Galloway, Heather Benning, 2014) ▪Inspection (Gala Sukhanova, 2013) ▪Febrero (Ruslan Magomadov, Rusia, 2014) ▪Eu queria ser arrebatada, amordaçada e nas minhas costas tatuadas (Andy Malafaia, 2015) […]