La película que (al fin) cayó del cielo
Lo exterior, como siempre en Lovecraft –y en un continuador ejemplar como el antedicho Derleth- trae devastación y desesperación: no hay un enemigo físico real para la batalla, sino que, por el contrario, es su propia familia la que se convierte en algo monstruoso. No desechen la posibilidad de ver esta película si son amantes del universo Lovecraft.