La palabra del tiempo que aspira a la eternidad. A propósito de «Lo que funda el silencio», de Luis Ramos de la Torre
Déjenme con las cosas fundadas en el silencio Sophia de Mello Breyner Andresen[1]Instante en “Antología poética”. Sophia de Mello Breyner Andresen. Traducción y prólogo de Rodolfo Alonso. Ed. Arquitrave, 2005 (p. 45). Nos introduce el historiador francés Alain Corbin (Lonlay-l’Abbaye, 1936) en su “Historia del silencio” que, en otros tiempos, los occidentales apreciaban la profundidad y […]
Amor y azogue. La alquimia de la palabra: a propósito de “Desvestir el cuerpo”, de Jesús Cárdenas
El espejo es la madre-rocío, el libro que diseca los crepúsculos, el eco hecho carne Federico García Lorca, “Suite de los espejos, 1920-1923” El espejo es considerado el símbolo por excelencia de la representación de la realidad al mostrar una imagen idéntica de lo que, mudo, contempla. No obstante, esta solo lo es en apariencia pues, […]
¿Qué quiere confesar Ani Galván?
Está bien. Convengamos que la pregunta parece muy clara. Pero no quisiera empezar por aquí, sino por otra confesión. Sí, esto es algo meditado y no puedo hacerlo de otra forma: confieso que no voy a empezar por el libro del que quiero hablar, que es, a su vez y entre otras cosas, una confesión […]
Lo que somos: acerca de un libro de Beatriz Miralles
Una obra de recalificación de lo cotidiano, eficaz ante los lectores, que constituye una forma de ilustrar la experiencia estética dentro de la construcción social de la realidad, macerando sus textos para movilizar, dentro de su experiencia ordinaria, nociones del mundo del texto, por utilizar la expresión de Ricoeur. Se trata, en efecto, de una inversión de la situación –no práctica, sino simbólica- toda vez que es inmenso el papel que la experiencia estética parece desempeñar en la constitución de la realidad social. Mientras haya discurso, hay esperanza. Y cuando la palabra desaparece, la lengua no tiene nada que ver. El recomienzo que esboza cada nuevo uso discursivo está cautivado por sus virtualidades de desarrollo, y pretende espontáneamente llevar la totalidad de la palabra a su estilo y a su mundo. Pero nada puede evitar que se exponga de nuevo. El mundo sigue pasando. Si mantener la palabra es la exigencia irrenunciable, se trata entonces de buscar no la verdad del lenguaje, que sería una tarea ardua e inútil, sino de que ese lenguaje esté sólo donde tiene que estar. Estar allí, en los días, siquiera para decirlo, que el lenguaje literario alcance lo sublime al despojarse de todas sus envolturas artificiales, de todos sus revestimientos lingüísticos convencionales, también cuando rompe los biombos sociales, políticos e ideológicos para abrazar el movimiento de la Φύσις.
César Simón y el jardín de la eternidad
A menudo, se debate sobre el lenguaje y la emoción en la literatura, como si la técnica y el uso pragmático del uno fueran contrarios a la humanidad y transcendencia de la otra; de tal modo que no pudieran coexistir en un todo, más allá de convertirlos en rivales y “echarlos a reñir”. Quizás porque […]