Hasta el próximo 20 de abril, La Neomudéjar (Centro de Artes de Vanguardia) recoge la muestra ‘Interpretando a Goñi; viaje a las antípodas de la mente’. En ella, nos adentramos en la obra de este multidisciplinar artista, con una visión y sensibilidad únicas, de la mano de 14 artistas – Yaky Bonacic-Doric, Antonio Laguna, Davide Ortu, Alain Cugnenc, Nieves Sebastian, Ze Carrion, Dr Homes, Jorge Sánchez, Jimena Aragonés, Bárbara Dominguez, Ovidiu Batista, Enrique Pratas , Julia Juaniz y Marijn Scholte – quienes, bajo sus distintos puntos de vista, se inspiran y reinterpretan las obras de este genial artista.
Juan Carlos Sánchez Almazán, comisario de la exposición, nos guió durante unas horas por el imaginario de este gran artista y sus reinterpretes y nos ha respondido a unas preguntas para Salitre Revista Cultural.
¿Cómo surge la idea de organizar un proyecto entorno a la obra de Lorenzo Goñi?
El proyecto “Los Multiversos de Goñi” surge del encuentro con José Luis Manzanares, director de la empresa cultural Tritoma, y con Inés Goñi, hija de Lorenzo Goñi, ambos habían colaborado juntos en un certamen de pintura que llevaba el nombre de nuestro artista.
De aquel encuentro recogí dos cosas: una cierta vergüenza por mi desconocimiento de una artista de su talento y la certeza de que teníamos que hacer algo especial para rescatar esta figura imprescindible. Así es como surge este proyecto que comienza siendo un desarrollo puramente conceptual pero que tanto Inés como José Luis entienden y apoyan desde el principio.
¿Qué proceso sigues para recopilar todas las obras y cuánto tiempo te lleva?
La selección y recopilación de obra para esta exposición ha sido un trabajo desarrollado a los largo de dos o tres meses muy intensos. La selección, que se había gestado un año antes, arranca cuando todos los artistas han confirmado ya su participación y partiendo de la elección previa de las obras que inspiran a cada uno de ellos, comienza un proceso de trabajo en el cual, los pasos de los artistas en la evolución de sus obras son acompañados permanentemente para conocer de cerca su progreso y poder seleccionar las obras que estarán finalmente expuestas. Por tanto esos dos, tres meses previos al montaje son de toma de decisión, trabajo con artistas y selección final de obra a exponer.
Es este un proceso inusual y vivo que tengo la suerte de compartir con Raquel Guzmán colaboradora inestimable en todo este proceso y con Pablo Vergara, ambos colaboradores directos de este proyecto.
En ‘Interpretando a Goñi’, 14 artistas de distintas disciplinas artísticas recrean diferentes obras de Goñi para crear, a partir de esta, una nueva obra que ha pasado por su tamiz. ¿Cómo fue la elección de estos 14 artistas? ¿Por qué ellos?
Desde el principio tenía claro que los artistas que buscábamos para esta muestra, debían enamorarse del proyecto y encontrar en la obra de Lorenzo Goñi una verdadera fuente inspiradora, con esta premisa esencial buscamos en diferentes entornos, fuimos sumando voluntades hasta completar los 14 artistas que finalmente participaron en el proyecto.
¿Por qué crees que un artista tan especial, con una obra tan diversa y personal ha pasado tan desapercibido en España? ¿Crees que algo tan grabado a fuego en nuestra idiosincrasia como el ‘no ser profeta en nuestra tierra’ ha influido en esto?
Desde luego que la particular manera de ser del pueblo español determina constantemente que se ningunee a grandes talentos y se ensalce una cierta mediocridad, que ha ido transcendiendo a lo largo de la historia de nuestro país. No obstante en el caso de Lorenzo Goñi aunque concurre igualmente este fenómeno, hay que destacar también que Lorenzo siempre fue un fugitivo de la fama, un escapista del éxito y del reconocimiento públicos. Refugiado en su sordera como un escudo, eludió a lo largo de toda su vida la notoriedad y la gloria, pues sabía que eran verdaderos grilletes para su libertad creativa, algo a lo que nunca quiso renunciar.
Esta faceta evasiva y libertaria de Lorenzo Goñi dio sus resultados y es evidente que aunque en vida gozó de cierto reconocimiento, hoy es un gran olvidado, un perfecto desconocido para el gran público.
A quien te acercas para descubrir más sobre la personalidad de Goñi, con un mundo interior tan rico, una vida tan atormentada marcada por su temprana sordera y con un punto de apoyo tan esencial como era el de su mujer?
La figura fundamental para conocer a Lorenzo Goñi es sin duda su hija, Inés Goñi, una mujer inteligente y perspicaz que parece haber heredado algunas de las cualidades humanas mas entrañables de su padre, con el que estaba muy unida. Ella es una fuente imprescindible, ya que narra de primera mano cómo era Lorenzo hombre y artista y cómo era su relación con el mundo y las cosas que le rodeaban. Junto a ella Pierre-André Reymond, su marido, un entusiasta enamorado de la obra de Lorenzo y gran conocedor como ella de su persona y de su obra.
Hay otras fuentes interesantes pero secundarias, porque su contacto es a través de escritos y correspondencia que cruzaron con Lorenzo, entre ellas destaca Camilo José Cela, gran amigo de Lorenzo, Federico Muelas, José Hierro, Tomás Borrás…
¿Qué va a encontrar el espectador que se acerque a la Neomudejar a ver la exposición?
La exposición de La Neomudéjar reúne 35 obras de Lorenzo Goñi y 25 obras más de los artistas que la han hecho posible. Se trata de una mezcla ecléctica reunida en torno a siete espacios esenciales que aglutinan una nutrida diversidad de disciplinas artísticas: pintura, videoarte, grabado, instalaciones, diseño gráfico, arte digital, murales, dibujo…
Es un recorrido por los grandes temas que presidieron toda la trayectoria artística de Goñi un artista, de mediados del siglo pasado, que dialoga y genera encuentros sorprendentes con artistas contemporáneos de vanguardia.
El espectador encontrará mucha autenticidad y fuerza expresiva, así como un gran talento concentrado en un solo espacio expositivo.
Sin duda, un artista que debemos descubrir. Para los que tengáis ocasión, podéis pasaros por La Neomudéjar hasta el 20 de abril.
Calle Antonio Nebrija s/n
28007 Madrid.
Viernes, Sábado y Domingos
De 11:00h a 21:00h
4 euros