Te ruego que abras bien los ojos. ¿Abres los ojos? ¿Estás acostumbrado a abrir los ojos? ¿Sabes abrir los ojos, los abres a menudo, siempre y bien?
Charles Édouard Jeanneret-Gris [Le Corbusier]
arquitecto, diseñador y pintor suizo nacionalizado francés
A pesar del insistente y permanente privilegio que los primeros arquitectos modernos manifestaron hacia el sentido de la vista como esta taladrante proclama del Corbu demuestra, la maqueta y el trabajo plástico siempre ha estado presente en la mente del arquitecto. En el caso concreto del maestro franco-suizo, su talento artístico, con una excepcional mano modeladora, y su tremendo sentido de la materialidad y de la gravedad, evitaron que su arquitectura quedara rendida a un reductivismo sensorial.
Potentísimo contenido el de hoy, pero, evidentemente, no nace de mi tanto dato comprometido. En Los ojos de la piel, Juhani Pallasmaa lo concreta elegantemente. «En lo que se refiere a las exclamaciones cartesianas y ocularcentristas de Le Corbusier, en su obra la mano tuvo un papel fetichista similar al del ojo. Un vigoroso elemento táctil está presente en los bocetos y en las pinturas de Le Corbusier, e incorpora esta sensibilidad háptica a su mirada hacia la arquitectura.»
Es tiempo de potenciar la materialidad en la arquitectura, el tacto, los ojos en la piel para ver lo que solo nuestra mente puede descifrar desde la experiencia física. Es tiempo de dar la posibilidad al ser humano, por encima de otros placeres visuales, de que realmente pueda ser humano en la arquitectura que pensamos. Amo tocar amigxs.
Os propongo que visitéis la cita035, donde ya conté algunas cosas bien interesantes del maestro.