Había una niña (seamos optimistas y creamos que lo era) que se balanceaba sobre una tabla de madera colgada en dos cuerdas en el corazón de aquella casa. ¿Cómo no iba a ser así? Ella era la Princesa de aquel Castillo, y aquel patio era el salón del trono, donde pensaba recibir a su pueblo, y donde tenía meditado tomar algún día el relevo de sus progenitores. Su trono se vestía de luz solar, de vegetación, de unos materiales amables y de sangre azul. Todo ello conformaba un lugar increíble para crecer, para reinar y para hacer el bien, o lo que es lo mismo pero en palabras más intensas, para Bailar, para Besar, y para Balancear su vida entera en aquella noble madera. Es fácil. La Casa B.
Esta vivienda ubicada en la ciudad de Ho Chi Minh, en Vietnam, es en palabras de sus propios creadores el estudio I-House, se trata de «un espacio abierto, pero introvertido; sencillo, rústico pero delicado. Dando prioridad a la luz natural y a la ventilación. Reduciendo al máximo el consumo de energía en favor del ahorro energético. Usando luces y sombras como elementos decorativos, …«, todo un larde de intenciones que se logran de una manera sutil y contundente a la vez. Proyectos como este hacen que me convierta cada vez más en poderoso fan de los edificios de viviendas unifamiliares en que un patio interior se traduce en el corazón y pulmón del hogar.
A través de materialidades diferentes, tales como cerámica, hormigón, madera o elementos metálicos; a través de elementos singulares tales como celosías delicadas, suficientes o contundentes, de escaleras infinitas, claraboyas y patios vegetativos; a través de una distribución lógica y jerárquica de la vida cotidiana, este proyecto logra un espacio mágico para vivir (siempre a mi parecer). Un proyecto que se resguarda del complicado contexto en que se ubica, pero que lo defiende a capa y espada. Tal y como los escuderos de aquella princesa algún día deberán defenderla.
Como siempre, aquí os dejo donde conocer mejor este proyecto donde otros lo contarán mejor que yo. Espero que hayáis disfrutado de la princesa.