Basculando entre el retrato y el autorretrato
Examinarse el cuerpo bajo el microscopio de la lente, imágenes que se
convierten en escritura de marinerx erosionadas por el agua y el tiempo.
Clavadas en un punto de no retorno, se suceden construyendo el mapa de la
memoria. Solo un vértigo de metamorfosis, alimenta esta adicción a seguir
disparando..
Del amor a la creación artística
Aprendí a través de ti y jamás he compuesto un verso ni he dibujado una curva que no provenga de los conocimientos que obtuve en nuestra preciada vida juntos. Tu obra emana de una fuente fluida, , tiene su origen en la candorosa canción de tu juventud. […]
La otra tarde, cuando te quedaste dormido en mi hombro, también yo me dormí. Pero antes de hacerlo pensé, que de todas tus cosas y creaciones, y repasaba tus años de trabajo, que de todas tus obras, tú continúas siendo la más bella. La obra más bella de todas.
Patti Smith del libro «Éramos unos niños»
Un impulso, una pulsión, una reflexión, una práctica, un intento de autorrepresentarnos para existir/resistir.
Registrar el proceso de transformación constante, tiempo-espacio.
Estás imágenes son mi punto de partida, creadas junto con Ona Haru para un proceso/proyecto que llamamos Éramos tan analógicas.
A los días de conocernos, sacó la cámara, el trípode, un dildo y su arnés más lindo. Esa vez nos retratamos para realizar unas intervenciones en las calles de Córdoba (Argentina), con motivo del 7M: aniversario de la muerte de Pepa Gaitán, asesinada por lesbiana. Día de la visibilidad lésbica.
El ritual de ponernos frente a la lente, se repitió muchas veces en los siguientes años. Los disparos. Cruzamos el Atlántico seis veces juntas, exploramos espacios, nuestros cuerpos y nos habitamos.
Compartimos en nuestro cotidiano el deseo de transformación a través de la creación.