Querida indecisión:
Queda poco tiempo para que elijamos quién dirigirá nuestros destinos. Y hoy, más que nunca, está en nuestras manos.
Sé que te planteas la utilidad de tu acción. Sé que te desmovilizan. Pero te conozco, al día siguiente sueles sufrir tus indecisiones. Por eso, porque te quiero, voy a intentar mostrarte mi visión, y espero ayudarte.
Las próximas citas electorales te dirán que son las más plurales de la historia, pero no estoy de acuerdo. Habrá muchas papeletas, pero tan solo tres opciones. La opción del bloque de mirar al pasado, la opción del bloque de mirar al futuro, y no hacer nada.
El bloque que mira al futuro es el que ha apostado por la ciencia y por la innovación. El bloque de futuro levanta la cara y mira al horizonte con ilusión. Es el bloque que suma los distintos géneros, y toda su diversidad. Quiere caminar hacia una sociedad de personas iguales y libres. Es el mismo bloque que trabaja por un espacio de convivencia en el que quepamos todas. Todas las personas, con sus identidades plurales, para basar en lo común un proyecto de prosperidad.
El bloque de futuro cuida y protege a sus gentes. Vivimos en sociedad para cuidarnos unas personas de otras. Viviemos juntos para vencer los peligros, las incertidumbre, y la tristeza de la soledad. La sociedad básica del bloque de futuro, nos permite prosperar con tranquilidad mientras somos fuertes. Y cuando nos abandonan las fuerzas, o tenemos un tropiezo, nos permite sentir el calor protector de nuestra sociedad. Y para que todo funcione todo el mundo colabora en la medida de sus posibilidades.
El bloque de futuro prospera trabajando, pero no mercadea con el bienestar de sus gentes. Tampoco mercadea con el aire, ni con el agua, ni con el sol. El bloque de futuro convive con el resto de seres vivos y su entorno. Este bloque sabe que los seres vivos dependen de él, al igual que él depende de ellos. Sabe lo que es finito e infinito, y actúa en consecuencia. Esto es clave para garantizar la supervivencia y el desarrollo de las generaciones futuras.
El bloque de futuro defiende la libertad de disponer del propio cuerpo. Defiende la libertad de traer vida, o la libertad de marcharse con la muerte. La libertad de disponer de un espacio de igualdad en el que el genéro, o la diversidad, no sea impedimento para ejercer el derecho a ser felices.
Ése es el espíritu del constitucionalismo. El espíritu de una sociedad protectora de mujeres y hombres libres que se cuidan. Sin embargo hay quien se queda en lo más simbólico. Hay quien se deja llevar por el individualismo de quienes quieren imponer el pasado mientras destruyen el futuro. Esos son egoístas amiga, y tú nunca los has querido. Por eso la historia la escribes tú.