Un nuevo año ha comenzado y junto con él, nuevos cambios se han venido dando desde los primeros días. El año 2025 desde sus inicios para muchas personas es visto como un año esperanzador, nuevos propósitos y metas por cumplirse, algo que emociona a muchos ya que es un nuevo comienzo para realizar aquello que por una u otra razón se ha venido postergando.
No obstante, así como el año 2025 empezó como algo esperanzador, también ha iniciado con mucha convulsión en el terreno de lo político, social, económico y hasta ambiental o al menos, ese panorama se ha visto en las últimas semanas al otro lado del charco, es decir, en América Latina.
La toma de protesta de Nicolás Maduro como presidente de la República de Venezuela el pasado viernes 10 de enero, generó un clima de manifestaciones, represión y diversas movilizaciones políticas y sociales en el país sudamericano debido a que las elecciones presidenciales se vieron de nueva cuenta manchadas por la corrupción y el control político del ejecutivo nacional de dicho país. Este aspecto generó un enorme descontento entre la oposición política al denunciar el fraude electoral y la sociedad venezolana que veía una esperanza de hacer posible un cambio total a su sistema político, el cual, ha sumergido a Venezuela en una crisis alimentaria, económica y política, donde muchas personas se han visto forzadas a dejar su país natal para migrar hacia México y dar el salto a Estados Unidos, tratando con ello alcanzar una mejor calidad de vida.
La migración es otro tema que va de la mano con las nuevas políticas que ha establecido Estados Unidos a partir del nuevo mandato que inicia el presidente electo Donald Trump, desde su llegada a Washington, el presidente del país más poderoso a nivel mundial en materia militar y económica estableció una serie de decretos ejecutivos en el que, los más importantes se manifiestan en la deportación masiva de inmigrantes latinos, entre los que destacan mexicanos, colombianos, venezolanos, haitianos, ecuatorianos y centroamericanos.
Otro de los decretos que se destaca en esta política nueva establecida por el presidente Donald Trump, es referente a los cárteles mexicanos, los cuales han inundado el mercado norteamericano de fentanilo y diversas drogas, la importación de armas desde el vecino país, ha generado un crecimiento de ola de violencia en México como también en Estados Unidos. Decretar a los carteles mexicanos como grupos terroristas con el objetivo de establecer estrategias que ayuden a confrontarlos con la fuerza militar norteamericana.
En ese sentido, la presidenta Claudia Sheinbaum ha establecido una política exterior de no permitir al gobierno norteamericano la incursión de aviones militares en territorio nacional con deportación masiva de personas que no sean mexicanos, estableciendo con ello una contra respuesta a las imposiciones de Donald Trump y dejando en claro que la soberanía mexicana se respeta muy independientemente de que el vecino del norte sea una potencia mundial.
Así pues, el convulso año 2025 inició con un gran cambio de la política exterior donde Latinoamérica ha establecido nuevas imposiciones hacia la nación estadounidense, se ha visto en México y se vio también recientemente con Colombia, donde el presidente Gustavo Petro le impuso el cobro de aranceles de hasta un 50 % en productos provenientes de Estados Unidos, obligando así a una renegociación y acuerdos entre ambos países, evitando con ello una futura guerra comercial.
Que va deparar los próximos días, es una incógnita donde México es pieza clave de la disputa con Estados Unidos, quien el presidente norteamericano ha preferido imponer aranceles comerciales tanto a la nación mexicana como también se ha visto envuelto en polémicas con Canadá, imponiendo políticas que más que resultados factibles, solo ha generado disputas territoriales, económicas y de política exterior.
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