Por todos es conocido que a lo largo de estos últimos años se han perdido millones de puestos de trabajo dejando a muchas familias sin un sustento con el que vivir dignamente.
Con este panorama y, tras haber buscado incansablemente una oportunidad de trabajo por cuenta ajena, muchos optan por la posibilidad de arriesgar los recursos ahorrados para emprender y crearse de este modo su propio puesto de trabajo.
Los emprendedores españoles han experimentado durante el año 2013 un claro crecimiento y auge sin precedentes como demuestran los datos que ofrece la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA) que indican que hasta el mes de noviembre en España se había registrado 17.944 emprendedores, con lo que la cifra final del colectivo se sitúa en 3.04 millones, cifra más que a tener en cuenta.
Generalmente, cuando escuchamos o leemos la palabra «Emprender», puede llevarnos a pensar en comenzar una idea de negocio novedosa pero, nada más lejos de la realidad. Se puede emprender un negocio partiendo de cero o como muchas de las veces ocurre, partiendo de una idea afianzada en el mercado, con una marca conocida y bien posicionada. Se trata de emprender un negocio con la fórmula de la franquicia.
Es un mercado que factura cerca de 26.000 millones de euros y da empleo a algo más de 246.000 personas.
El sistema de franquicias es el modelo más beneficiado por los emprendedores españoles. Es aquí donde ellos se encuentran más cómodos y confían en la solvencia y seguridad que les ofrece este sistema.
El modelo de negocio de las franquicias aporta una serie de características que lo convierten en uno de los predilectos para los emprendedores. La seguridad que ofrece la empresa matriz y las facilidades que aporta (formación, publicidad, montaje, productos…) hacen que sea una apuesta segura.
Puede considerarse la forma más sencilla de emprender, sin embargo, entrar en el sistema de franquicias implica asumir una serie de normas. Aunque el franquiciado o como en este caso le he querido denominar emprendedor, es un ente independiente societariamente, tiene una relación de dependencia con el franquiciador ya que forma parte de una red que se rige por normas internas marcadas en el contrato de franquicia.
Esto significa que las decisiones que adopte, las toma previamente el franquiciador. Se podría asemejar a la relación existente entre la sociedad cabecera de un grupo de empresas con una de sus filiales.
Cuando alguien decide emprender, suele guiarse por la experiencia y/o la formación que posee y ha adquirido a lo largo de los años pero, si hablamos de emprender una franquicia esta experiencia y formación no es tan relevante incluso puede llegar a ser innecesaria ya que, la propia empresa franquiciadora es la que forma y da el Know How a la franquiciada.
Muchas franquicias buscan candidatos que cumplan una serie de requisitos afines a la actividad –sobre todo, si es muy especializada–, pero también hay otras que descartan entre sus nuevos asociados a aquellos que hayan trabajado en una actividad similar, para evitar a los resabiados.
Es por ello que si estás pensando en montar un negocio y no sabes de que o no quieres romperte la cabeza desarrollando un plan de negocio, las franquicias te ofrecen la posibilidad de tener tu propio negocio a cambio de un canon.
En cuanto al género de los emprendedores debemos resaltar el papel protagonista que están adquiriendo las mujeres y entrando en datos estadísticos hay que comentar que el incremento del peso de las mujeres en el conjunto del colectivo es ya del 34,7% del total. En comparación con la tasa del 2008 (un 32 %) es un dato muy llamativo.
Existen una gama muy amplia de franquicias que se ofrecen en internet, oscilando la inversión mínima desde 0 euros hasta más de 300.000 euros. Es en este punto donde cada uno ha de valorar la viabilidad de cada proyecto ya que no todas las franquicias están igual de bien posicionadas en el mercado y eso puede afectar seriamente a los resultados proyectados inicialmente.
En conclusión, los emprendedores están atravesando un momento dulce dentro de una situación económica complicada, y de ello se está beneficiando el sistema de franquicias.
Algunas franquicias de existo:
El Grupo Restalia con sus franquicias 100 Montaditos, La Sureña y The Good Burger, es uno de los más potentes a día de hoy en el sector de franquicias de restauración.
Otro grupo de franquicias que ha conseguido posicionarse como uno de los de las marcas de referencia dentro de su sector en nuestro País es, el Grupo Vips. Compañía multimarca y multiformato que gestiona 6 cadenas de restauración (Vips, VIPSmart, Ginos, The Wok, T.G.I Friday’s, y Starbuck)
El Grupo Barril, también se encuadra dentro del sector de la hostelería con una serie de marcas, quizá menos conocidas pero no por eso con menos potencial de crecimiento.
Por último, aquí dejo un enlace a las franquicias más buscada y populares para emprender. Quizá muchos os asombréis al ver marcas que jamás os pensaríais que fueran a poder franquiciarse.
El modelo de franquicias es una buena idea para invertir, con el estudio adecuado podemos iniciar ese proyecto del que podemos sacar mucha ventaja