En la actualidad, con los apuros financieros y la incertidumbre existente entre los que tienen un trabajo a poder perderlo, la planificación financiera domestica resulta más que imprescindible, ya que, tener controlados todos los gastos e ingresos, sobre todo los gastos resulta una cuestión importante de cara a afrontar cualquier tipo de imprevisto que pueda surgirnos.
Aun así, la educación financiera es algo que casi nadie recibe al crecer y, sin embargo, es uno de los principales componentes de éxito financiero. Si eres nuevo en las finanzas personales o simplemente buscas maneras de expandir sus conocimientos financieros, aquí se presentan cinco pasos sencillos para ganar una base financiera sobre la que actuar para tener un control sobre el presupuesto domestico:
1 . Programar fechas de dinero semanal
Los millonarios gastan, en promedio, 8,4 horas al mes en la gestión y la planificación de sus finanzas, según la investigación realizada por el teórico de negocios, Thomas Stanley. Mientras que muchas personas quieren ser millonarios, la mayoría de ellas no dedica el tiempo y la energía necesarios para hacer que esto suceda.
En su lugar, se debería configurar un evento recurrente en el calendario con la fecha y el dinero semanal, y asignar al menos una hora a la semana para revisar las finanzas. En la fecha asignada, se debe actualizar el presupuesto disponible, revisar los gastos futuros, pagar cuentas (aunque se debe automatizar tanto como sea posible), revisar las cuentas para conocerlas en exactitud y manejar otros asuntos financieros apremiantes. Intenta que estos momentos sean lo más agradables posibles, haciendo cualquier cosa que haga que el proceso resulte divertido. Cuanto más divertido y ameno lo hagas, lo más probable es que seguirás haciéndolo y cogiendo un habito y, la consistencia es lo que cuenta .
2 . Comprometerse 20 minutos a la semana para leer acerca de las finanzas personales
No intentar aprender todo lo relacionado con las finanzas personales de una vez. En lugar de ello, es mejor romper la educación financiera en trozos digeribles. Asigne 20 minutos a la semana (como parte de, o además del tiempo dedicado en el punto anterior) a leer sobre temas de finanzas personales. Elegir un tema a la semana y sólo leer sobre ese tema hasta entenderlo y, a continuación, pasar a otra cosa. Algunos grandes libros para empezar son: Yo te enseñaré a ser rico por Ramit Sethi, Sobre mis dos pies por Manisha Thakor y Soldado de Hacienda por Jeff Rose.
3 . Hablar con la gente que admiras
Al comenzar a aprender sobre temas de finanzas personales, tales como el gasto, ahorro, crédito, deuda, las inversiones y las estrategias de jubilación, es recomendable, aplicar lo que se aprende hablando de ello con la gente que admiras. Muy frecuentemente te encuentras que hay un montón de parloteo financiera por ahí, pero la mayoría de lo que los amigos y familia saben sobre el dinero es malo.
En su lugar, hablar con los mentores y otros empresarios que tienen éxito en sus vidas financieras. Preguntar sobre sus éxitos y fracasos. Al igual que en los negocios, se pueden evitar un montón de contratiempos financieros, aprendiendo de los errores de otros. Sin embargo, hablar de dinero sigue siendo un tema sensible para muchas personas, por lo que empezar poco a poco en las conversaciones dará una mayor profundidad a las mismas.
4 . Poner a prueba las estrategias en su propia vida
La mayoría de los empresarios se dan cuenta de que la mejor manera de saber si una idea de negocio va a funcionar o no es probarla. Esta misma filosofía es extrapolable a las finanzas personales. Hay un montón de sistemas y programas por ahí para ayudar a presupuestar los ingresos y los gastos mensuales, pero no se sabe lo que funciona mejor hasta que no se prueban.
5 . Contratar a un planificador financiero certificado
En caso de no poder afrontar o no saber como afrontar el reto de planificarse uno mismo sus finanzas personales, quizá es hora de pensar en la ayuda de un profesional. ¿Como saber si necesita contratar a un planificador financiero certificado?
- Tener poca o ninguna experiencia en la planificación financiera.
- No tener ganas de hacerlo todo por su cuenta
- Quieres una opinión objetiva e imparcial
- Tener una situación financiera compleja
- No tener el tiempo para hacerlo todo por su cuenta.
Independientemente de dónde se encuentra en su viaje financiera, la dedicación y el compromiso con la educación financiera continua son la clave. La verdadera maestría en cualquier tema viene de la práctica constante, la formación y el afilado. Asegúrate de continuar dedicando tiempo y energía para sus finanzas personales a lo largo de la vida.
El saber no ocupa lugar.